HISTORIA
En marzo de 1990 nació DEMAR Instaladora y Constructora S.A. de C.V. como una empresa mexicana enfocada al desarrollo de proyectos para la industria petrolera.
Por más de dos décadas hemos desarrollado actividades en las regiones marinas y continentales del país con excelencia y responsabilidad, bajo el estricto cumplimento de los estándares de calidad, normas y reglamentaciones de PEMEX, lo cual se ha reflejado en la satisfacción de nuestros clientes.
Hoy, 24 años después, DEMAR ocupa una posición relevante entre las empresas de la construcción que trabajan para PEMEX.
Misión
Somos una empresa mexicana enfocada al desarrollo de proyectos para la industria petrolera, brindando servicio a Pemex exploración y producción, con los más altos requerimientos tecnológicos que nos encomienden.
Visión
Demar Instaladora y Constructora S.A de C.V es una empresa líder en el ramo de la instalación y construcción que tiene como objetivó para el 2018 ser reconocida a nivel nacional e internacional por su liderazgo en la calidad de los servicios, la alta capacidad de su personal y el uso de tecnología de punta.
Valores
Confianza
Somos confiables por nuestra integridad, honestidad, legalidad y sinceridad al tratar con nuestros clientes, proveedores y trabajadores.
Respeto
Respetamos y valoramos los puntos de vista de los demás. Respetamos las leyes federales, estatales y municipales de México. Respetamos la confidencialidad de la información proporcionada por nuestros clientes y proveedores.
Determinación
Estamos determinados para alcanzar el éxito y nos fortalecemos ante cualquier reto. Queremos ser reconocidos por nuestro empuje para resolver cualquier problema que se presente para nosotros y para nuestros clientes.
Excelencia
Buscamos la excelencia en todo lo que hacemos y estamos comprometidos para entregar trabajos con la más alta calidad, excediendo las expectativas de nuestros clientes.
No Causar Problemas
No causar problemas es un concepto y una filosofía adoptados por DEMAR para reflejar nuestra ética de negocios. Todo lo que hagamos tendrá, como primera consideración, la idea de no causar problemas. Problemas a nosotros como individuos, a otras personas, a nuestros equipos, ya sean propios o rentados, a nuestros materiales y a otros activos, al medio ambiente en que trabajamos, al planeta como un todo y a las futuras generaciones que heredarán las cosas que les dejemos.